¡¡Ohaiyou!!

Si has llegado hasta aquí, ¡algo es algo! Te doy la bienvenida a mi blog y que espero que te guste la estancia en el tren que lleva al surrealismo y a la curiosidad extrema ^^
Abróchense los cinturones y, ya que han decidido subir, ¡no esperen el fin del trayecto para consultar, reir y comentar!

domingo, 30 de mayo de 2010

Esta casa es una ruina 1

Y es que a este piso en el que vivo, poco le falta para derrumbarse.

Vivo en una comunidad formada por 3 pisos de los cuales el del medio lo cogimos de alquiler des de hace casi un año.

El pisito (o pisazo) tiene unos 30 años, está formado por 4 habitaciones de 25 metros cada una (la mía además tiene un balcón de 8 metros cuadrados), un comedor de 99 metros cuadrados, una señora cocina de unos 15 metros, además de tener dos terrazas: una por un lado del piso y otra por el otro lado.
Además, al ser un bloque con solo 3 pisos, tiene dos plazas de parking para cada vecino, un mega-patio con una piscina y un señor huerto (dividido entre los 3 vecinos) de 150 metros.

El propietario ha querido ofrecernos el ''chollo'' de pisazo con la condición de que sea un alquiler con opción a compra en no más de 5 años.

El año pasado, cuando vimos por primera vez el piso dijimos: oh! qué grande y qué bonito! Además está en una zona muy tranquila! Como seremos 5 hasta que Dan y yo nos vayamos a otro piso a vivir juntos, tendremos todos nuestro espacio sin molestarnos unos a los otros! Nos quedamos a vivir en él!
Pero a medida que ha pasado el tiempo, hemos ido descubriendo por qué el propietario ha decidido vender el piso.

Al entrar en verano, en el piso se estaba genial, pues no hacía calor, se podía ir al jardín a tomar el sol al césped, teníamos mucho espacio para hacer lo que quisiéramos, pero...
Primer problema: La piscina está estropeada. Los vecinos no quieren arreglarla porque son mayores y no la disfrutan. Precio a pagar (de nuestro bolsillo) si se quiere arreglar: 300€.
Segundo problema: Cada piso tenía su propia caldera excepto el nuestro. En un primer momento se dijo que ya se pondría cuando llegara el frío. De momento se dijo ok hasta más adelante.

Después de llevar un tiempo viviendo en el piso, cada vez se fueron encontrando más problemas...
El techo del vecino de arriba, que está encima de nuestro balcón, se cae a cachos.
Llamamos al propietario, lo mira, hablan mis padres con él... Conclusión: No sé qué ha pasado, la cosa sigue igual. Cualquier día de estos se nos cae en la cabeza, así te lo digo.
Una tarde, de repente, empiezan a saltar los plomos. Des de ese día empezamos a notar que había algo que fallaba...
Eso hasta que un día, saltaron los plomos y nos quedamos sin luz todo un domingo.
Mi padre llamó al propietario (que casualmente había trabajado con mi tío que es electricista), vino, hizo un apaño provisional hasta que se pudo comprar un nuevo aparato para que no saltaran más los plomos. También, todo hay que decirlo, como continuaron saltando los plomos, descubrimos que la instalación eléctrica del piso está hecha polvo y que no se puede enchufar el horno + secadora a la vez. Aún menos podemos enchufar el horno + lavadora + secadora. Así que todo tiene que ir por turnos.

Llegados a este punto, nuestro mosqueo empezó a aparecer con el tema del piso (Mi padre como si nada, porque, total, tienen su huertecillo con sus verduritas plantadas, su mega-salón, su espacio... Mi madre, en cambio, sí que empezó a quejarse), pero bueno, esperábamos que no surgieran más cosas...

Como teníamos dos baños, uno de los cuales tenía un jacuzzi recién instalado, después de usarlo unas cuantas veces vino el vecino de abajo a quejarse de que tenía una filtración de agua... Mi padre llamó al propietario, vino a revisarlo y, al final, tuvieron que llamar a los paletas para que vinieran a repararlo.
 Como las tuberías del jacuzzi pasan justo por una de las paredes de la habitación de Dan y mía, tuvieron que picar y agujerear toda la parte inferior de la pared para reparar el problema.
Una vez reparado el problema, resulta que habían dejado mal la instalación y habían dejado que, por el grifo de agua fría, saliera el de agua caliente y al revés. Otra vez a llamar a los paletas para notificar de esto y que vengan a repararlo.

Después de este 'incidente' (y dejar el agujero en la pared que todavía no se ha cerrado...) llegó el frío y aparecieron más problemas: la calefacción.
Resulta que se tenía que hacer toda la instalación de la calefacción de 0 porque el propietario sólo hizo la instalación de los radiadores.
Llamamos al propietario, vienen a hacer la instalación de toda la calefacción de la casa y, después de unos días, tenemos calefacción! Bien!
Unos días más tarde, de repente, empezaron a saltar los plomos cada dos por tres. Curioso, pues no habían vuelto a saltar des de hacía tiempo.
Después de volvernos a tirar una tarde entera sin luz, se descubrió que la instalación de los tubos de la calefacción se había hecho justo por encima de la de los cables de la luz y, cuando se usaba mucho la calefacción, se humedecían los tubos y humedecían los cables de la electricidad.

Conclusión: La instalación de la calefacción la hicieron fatal.
Mi padre, todo sea dicho, como es un poco calzonazos, no quiso volver a llamar al propietario, hizo un apaño casero para que los tubos estuvieran bien aislados de los cables de la electricidad y no saltaran más los plomos.

Para acabarlo de matar, durante el invierno no se notaba la calefacción en nuestra habitación, por lo que tuvimos que comprar un calefactor porque la temperatura de nuestra habitación siempre estaba a unos 15º más baja que el resto del piso.
Al poner el calefactor para no morirnos de frío, empezaron las quejas de mis padres porque 'luego la factura de la luz sube por las nubes!'.
Para más inri, esto hacía que saltaran más los plomos (de nuevo). Así que, a la mínima que estábamos en casa, cada hora venían a controlar si teníamos el calefactor encendido para que lo apagáramos...
Conclusión: Cada dos por tres Dan y yo resfriados.

Después de tanto frío y tantos días de lluvia, un buen día me dio por hacer limpieza en la habitación y, al mover la cama, detecté un charco enorme de agua justo debajo.
Además, detecté que empezaba a haber moho en la pared.
Avisé a mi madre, avisé a Dan cuando llegó de trabajar, nos pusimos a limpiar el charco, el moho y analizamos de dónde podría haber venido el moho.
Investigamos un poco y vimos que, por la parte de la ventana y parte del techo, empezaba a haber moho (pero nada exagerado, sólo un poco).
Lo limpiamos todo bien con lejía y, cuando mi madre avisó a mi padre, le dijo que avisaría al propietario cuando hiciera mejor tiempo...

Al llegar el buen tiempo decidí sacar la ropa de verano del canapé hermético de la cama, ir al armario a sacar las mochilas, etc... Cuando, de repente, vi una capa verde de moho encima de toda la ropa y las mochilas verdes de moho... (Ver post: Moho, moho y más moho... )
Ahora comprendemos porque Dan y yo nos hemos tirado, des de la última vez que limpiamos con legía, con resfriados constantes, Dan parece ser que ha cogido una alergia al moho, yo cada dos por tres he estado enferma con faringitis, anginas...

Aparte de todo esto, como Dan y yo somos una pareja consolidada, tenemos nuestra habitación y, evidentemente, como toda pareja, necesita sus momentos de intimidad.
Pues bien, hemos llegado a la conclusión de que, a cualquier hora, en esta p.... casa no es posible.
Cada vez que llegan mis padres de algún lugar o les da el pronto, vienen a picar a la habitación.
Al principio de entrar a vivir estipulamos que: Si decimos que NO SE PUEDE ENTRAR, es que NO SE PUEDE ENTRAR. Pues bien, a mi madre, cuando le viene en gana se lo pasa por el forro, habiéndonos pillados 'in fraganti' en más de una ocasión.
Evidentemente, Dan y yo nos ponemos echos una furia, pero para nuestra sorpresa, ella, en vez de disculparse, es que se parte el culo de risa! Y qué gracia le encuentra? Porque yo precisamente no la molesto cuando está con mi padre en la habitación!

Salir de casa: Así como mi hermana entra y sale de casa cuando le viene en gana, a nosotros cada vez que vamos a salir por la puerta nos cae el interrogatorio de detective de: ¿A dónde váis?  ¿A qué hora volveréis? ¿Con quién váis?
Entiendo que sea su hija menor, pero Dan no es su hijo y los dos somos suficientemente mayores para tener que estar dando explicaciones como si tuviéramos 15 años... Antes de entrar a vivir con mis padres estas cosas no ocurrían... alguna explicación? Porque yo no lo entiendo.

La comida/cocina: Mi madre, acostumbrada a las comidas familiares, siempre hace comida para 8 personas por lo menos. Y somos 5. Pues bien, las costumbres alimenticias de Dan son bastante diferentes a las de mi familia y no siempre lo que cocina mi madre le gusta (normal, cada uno tiene sus costumbres de comida en casa). Pues bien, para que no haya muchos problemas con el tema de la comida, Dan y yo siempre intentamos comprar comida para nosotros. El caso es que, si a Dan no le gusta algo que ha cocinado mi madre y se quiere hacer otra cosa (para algo se compra su propia comida), mi madre ya le hace el interrogatorio de detective (si a él no se lo hace, me lo hace a mi) de: ¿Qué te vas a hacer de la nevera? Este mediodía he hecho esto de comer, ¿por qué no te lo comes?, tengo verdura, ¿Te apetece? (Eso cuando no lo miran mal porque va a la nevera a cogerse algo para picar de su comida...) Así que Dan, en parte, en ese tema también está harto.

El comedor: 'territorio comanche', pues allí se juntan en las comidas mi padre y mi hermana que se llevan fatal y siempre acaba habiendo alguna discusión por medio (eso cuando a mi hermana, con la que no me llevo tampoco muy bien que digamos, no le da por hacerme el interrogatorio padre sobre mi vida y mis futuros eventos sociales para autoinvitarse).

Los sofás y la tele: Son 'sagrados' para mi padre, pues todo canal que se vaya a poner tiene que estar supervisado y aprobado por mi padre, sino, empieza a soltarnos indirectas del estilo: ¿Qué no tenéis trabajo que hacer? ¿Qué no os váis a la habitación?

En fin, que mucho piso mucho piso, y después lo único que podemos disfrutar al 100% es nuestra habitación (y más la podemos disfrutar cuando nadie nos viene a picar a la puerta).

Después de toda esta charla, el caso es que, en vista que mis padres no se preocupan por nuestra salud porque 'ellos viven muy bien', con su huertecito, su espacio, etc. nosotros hemos empezado a plantear irnos del piso de mis padres para tener más intimidad (la intimidad es lo primero, hoiga!).
El problema: mi hermana vive del cuento y mi padre no tiene trabajo, así que los únicos aportadores monetarios al piso somos Dan, mi madre y yo.
Como el padre de Dan tiene un fondo monetario que no amortiza, le propuso que se buscara un piso, que le pagaría la entrada para que pudiéramos ir a vivir.
Pues bien, después de haber estado meditando la idea, hemos pensado que lo mejor, actualmente, es comprar un piso, alquilarlo, ir viviendo aquí hasta que finalice el contrato de alquiler y luego nosotros ir a vivir al piso nuevo.
Como hemos tomado esta decisión, he pensado en comentárselo a mis padres para que fueran haciéndose la idea... pues... ¡Para qué he dicho nada! Mi padre se ha puesto como una furia, diciendo que Dan y su padre hagan lo que quieran con el dinero, que no lo amortice en un piso, que su padre compre un local y lo alquile, que, dentro de dos años hay que comprar la casa esta, blablablabla...

Así que, ahora mismo, lo que estoy es INDIGNADA... Si se supone que entramos a vivir con la idea de irnos luego a un piso Dan y yo (así lo comentó también mi padre), a santo de qué se tiene que poner ahora así? ¿Qué problema hay en que busquemos nosotros un piso? ¿Cómo nos vamos a quedar a vivir en una habitación que tiene tantos problemas y que, encima, mi padre ni se molesta en arreglarla? Qué pasa, ¿que ahora tenemos que ayudar a comprar este piso del cuál estamos hasta las narices?

En fin, miedo me da el rumbo que está tomando esto...

1 comentario:

  1. SALID DE ESA CASA DEL TERROR YAAA!!
    y razonad con los papis,aunque aveces parezca imposible, porqe no es nada justa la postura q ellos defienden :(
    sed un poco egoistas y mirad pro vuestra propia salud, qe si no lo haceis vosotros mismos...

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